Celebra el Dia de Muertos en cualquier rincon de Mexico con la renta de autobuses.

Sin duda alguna, la celebración del Día de Muertos es una de las festividades más tradicionales y con mayor riqueza cultural en México, la cual arrebata la atención de miles de turistas que nos visitan de todas partes del mundo, gracias a la forma tan peculiar con que los mexicanos vemos y convivimos con la muerte; y debido a que se celebra en todos los rincones de nuestro país, la renta de autobuses resulta ser el medio de transporte más recomendable para visitar varios lugares y no perderte de ningún espectáculo.

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Aunque es un tópico considerado como morboso, esta fiesta a la muerte, es celebrada con gran alegría, y a pesar de que se desarrolla en fechas próximas al Día de Todas las Almas y al Día de todos los Santos, en vez de sentir temor por los espíritus malignos, el sentido del humor que nos caracteriza, crea en este día un ambiente más tranquilo y llevadero, un poco parecido al del Halloween, pero dándole más relevancia a la celebración, y respetando las vidas de nuestros difuntos.


De acuerdo a la costumbre, el 2 de noviembre, los fallecidos vuelven al mundo de los vivos para poder convivir un día más con sus familiares y seres queridos, y de esta manera, deleitarse con todas las cosas que disfrutaban mientras estaban con nosotros: comidas, bebidas, posesiones, bienes, y compañía, por mencionar algunas.

 

Esta festividad, que combina componentes de tradición y religión, tanto católica como indígena, fue reconocida el 7 de noviembre del 2003 como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO.


Es por esto, que aunque se celebren estos días en cualquier parte del territorio nacional, seleccionamos los  5 mejores destinos para que puedas experimentar por ti mismo, con la ayuda de la renta de autobuses, esta  folclórica y extraordinaria festividad:


  • Pátzcuaro, Michoacán: este espacio natural, integrado por arquitectura colonial y calles empedradas, es el ambiente perfecto para la celebración. En este pueblo, según sus costumbres, acogen a los “muertos chiquitos” el 1 de noviembre, en otras palabras, los que partieron hacia el otro mundo sin alcanzar una edad madura; mientras que los adultos realizan su visita el día 2. Para llevar a cabo este festejo, los pobladores se presentan en las tumbas de sus parientes para armar ofrendas constituidas a base de flores, bebidas, velas y alimentos. Ya que están ahí, pasan toda la noche despiertos, para aguardar el arribo de sus queridos muertos a este mundo. A este momento, también se aúnan otros pueblos aledaños a la región, tales como Janitzio, Zirahuén, Ihuatzio y Tzintzuntzan.


  • Mixquic, Ciudad de México: sin lugar a dudas, es uno de los pueblos más emblemáticos de la zona (no por nada se le apoda como “lugar de misticismo”) y viven esta conmemoración de una forma muy especial. Esta población, localizada en el sur del Distrito Federal, en la delegación de Tláhuac, inicia la celebración a partir el mediodía del 31 de octubre, hora en la que se hacen tañer las campanas de la Parroquia de San Andrés, que notifica la venida de los espíritus de los infantes. El día 1 de noviembre, la gente se reúne para recordar a todas las jóvenes ánimas que se marcharon de este mundo. Al siguiente día, se pone en los altares el almuerzo para los adultos (compuesto en gran parte por pan de muerto y calaveritas de azúcar), quienes hacen su aparición entre plegarias y oraciones. A las 6 de la tarde de ese día, los habitantes de Mixquic asisten a los panteones para decorar las tumbas con veladoras, flores de cempasúchil y papel picado. 


Otros de los sitios que puedes recorrer con la renta de autobuses, y no te puedes perder en estas fechas, son: 


  • Oaxaca, Oaxaca: otra gran opción es visitar la capital de este hermoso estado, ubicada en el sur de la República. En este lugar, los arreglos comienzan con algunos días de anticipación, cuando los habitantes se presentan en los mercados locales para adquirir todos los componentes para crear una ofrenda. Una vez que llegan los días 1 y 2 de noviembre, la ciudad se enciende gracias a la iluminación de los cirios de las múltiples ofrendas instaladas en los hogares, así como en numerosos espacios públicos, como el centro de la ciudad. Asimismo, el característico aroma a incienso, penetra el ambiente de respeto que se vive, al mismo tiempo que en las principales calles se escuchan algunas de las canciones más tradicionales de la zona, como “Dios nunca muere”. También, durante estos días los personajes más representativos que giran en torno a la muerte (el diablo, el sacerdote, el doctor y el enfermo) recorren las calles reluciendo trajes vistosos y contando provocadoras y graciosas rimas. Por otro lado, se lleva a cabo una exhibición de alfombras decoradas con flores y mosaicos, los cuales, por lo general, se realizan después de nueve días de haber enterrado al difunto; a la par en que los cementerios se llenan de adornos y luz. Además de disfrutar esta celebración, puedes optar por probar la exquisita gastronomía del estado, así como sus bebidas, incluyendo el tradicional mezcal.


  • Xochimilco, Ciudad de México: es uno de los lugares que tiene mayor atracción turística en la capital del país. Con antelación a la participación en esta tradición, se desarrolla una producción escénica que tiene lugar en el embarcadero de Cuemanco, referente una de las leyendas más conocidas en México: “La Llorona”, la cual prepara a todos los participantes para la gran fiesta. Cuando llegan el 1 y 2 de noviembre, al igual que en cada ciudad de la República Mexicana, Xochimilco se ilumina, no solamente con la llama de las velas y los colores de los altares y ofrendas, sino también con el ardiente fervor de los creyentes. De igual modo, podrás disfrutar de místico paseo nocturno en las trajineras, pero debes tener en cuenta que al ser un espectáculo tan maravilloso y único, deberás reservar tu lugar con algunas semanas (inclusive meses, de ser posible) de anticipación, ya que la demanda es gigantesca.


  • San Miguel Allende, Guanajuato: en esta ciudad, el Día de Muertos ha adquirido una enorme relevancia, y destaca de todas las demás, ya que desde el 30 de octubre, hasta el 2 de noviembre, se efectúan variadas exposiciones, eventos, presentaciones musicales, fiestas en el jardín principal y recorridos por los cementerios y ofrendas típicas.Además, desde hace algunos años (en el 2012 para ser exactos), surgió “La Calaca”, un festival que combina el homenaje a los fieles difuntos con expresiones artísticas; así, aparte de tener la fortuna de contemplar la solemnidad con la que la gente recibe a sus seres queridos desde el más allá, lograrás deleitarte con los distintos ejemplos de arte y cultura, en los que “la muerte” tiene el papel protagónico.
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